¿Alguna vez te has planteado para qué te alimentas cada día? Posiblemente lo primero que te venga a la cabeza sea el placer que te reporta, o la necesidad de comer para obtener energía… pero, en realidad, es una pregunta que requiere de mayor reflexión. Si realmente quieres crear activos de salud en ti, si deseas alcanzar un estado de bienestar superior, debes entender la importancia de una nutrición consciente, activa, viva, ordenada y rítmica.
La importancia de una alimentación consciente
¡Es hora de despertar al auténtico sentido de la alimentación, ese gran recurso interno que posees para generarte bienestar! ¿Te gustaría saber por qué se considera nuestra principal fuerza de salud? Seguro que has escuchado alguna vez aquello de “somos lo que comemos”, ¿verdad? Pues realmente ése es el primer motivo: tu cuerpo está formado por millones de células y éstas se construyen, se reparan y funcionan adecuadamente a partir de los nutrientes que tú le aportas. Las membranas de tus células, por ejemplo, se construyen con grasas… ¿Crees que esas membranas serán de la misma calidad si consumes grasas insaturadas (procedentes de las nueces, el aguacate o el pescado azul), que si son de tipo trans (bollería industrial)?
Conocer los grupos de nutrientes, saber dónde puedes encontrar los más saludables y comenzar una alimentación consciente es el primer paso para conquistar un estado de bienestar superior.
La importancia de una alimentación ordenada y rítmica
El segundo motivo por el que afirmamos que la alimentación es una gran fuerza generadora de salud, es su potencia sincronizadora. ¿Qué significa esto? Imagina por un momento tu cuerpo, con todos sus órganos, como una gran orquesta con múltiples y diferentes instrumentos. La alimentación ordenada, rítmica y realizada en las horas óptimas, actúa como un excelente director de orquesta: da la entrada a cada uno en el momento adecuado y consigue que, entre todos, suene una melodía armoniosa y saludable.
Si ordenas tu alimentación, automáticamente el resto de funciones se armonizan y empiezas a notar un mayor bienestar. Esta práctica se llama cronodieta y la vamos a ir conociendo bien en este espacio.
La importancia de una alimentación responsable
Pero, además de todo esto, me gustaría hablarte de algo más. Cuando empiezas a llevar una alimentación consciente de para qué comes, de qué alimentos son más saludables y por qué, y de cuáles son las mejores horas para alimentarte… de manera progresiva se despertará en ti un nuevo interés: ¿qué come aquello que tú comes? ¿Cómo crían y tratan médicamente a aquellos alimentos de origen animal que estás consumiendo? ¿Son de temporada los vegetales que tomas? ¿Son de proximidad para poder extraer el máximo potencial a su poder de nutrirte?
Así, de manera natural y paulatina, al empezar a cuidar de ti empezarás a hacer un consumo cada vez más responsable, mejorando la salud y el bienestar de aquellos que nos alimentan y de la misma Tierra. Pequeños cambios en ti, generarán activos en salud no sólo en tu cuerpo, sino en todo tu entorno.
¿Quieres que comencemos juntos a encontrar el auténtico valor y poder de una nutrición saludable?